Uceda

Me llamo UCEDA y me abandonaron en un pueblo con el mismo nombre. Ya os podéis imaginar .... hembra .. y abandonada ... significa ... camada. Efectivamente, acabé pariendo una camada de pequeños que me costaba mucho alimentar ya que yo no conseguía encontrar mucho que comer. Afortunadamente vinieron unos voluntarios con una jaula trampa. Estaban a punto de llevarse a mis cachorros porque yo no quería entrar en la jaula a comer pero al final probaron a meter a mis hijos en la jaula y, como buena madre, no me quedó mas remedio que entrar en la jaula para intentar sacarles. Así que fuimos capturados y trasladados a Madrid, al albergue de la Asociación ALBA. He criado a mis hijos en un cuarto muy calentito y con todas las atenciones necesarias. Mis hijos ya no me necesitan y ahora tengo que recuperarme yo. Tengo una fractura antigua en una de mis patas delanteras que me ha dejado una pequeña cojera. Los vetes piensan que no tiene sentido operarme ya. Ahora convivo con otro perro y estoy empezando a perder el miedo. Me dejo tocar y nunca echo la boca pero a veces del susto me pongo a temblar. Necesito mucho cariño y paciencia y seré una nueva perra que ya pueda empezar a disfrutar de la vida. Cosa que no he hecho hasta el momento. Te vienes a ayudarme?

Ya está castrada. Es negativa de leihsmania y filaria, según analíticas generales no hay sospecha de ehrlichia.

-30 diciembre 2017

La voluntaria Irene comenta de Uceda:

Tiene mucho miedo pero es muy, muy buena. Se deja poner el collar y el arnés, acariciar, etc. Pasea muy bien con correa, va contigo y te sigue, no se asusta demasiado y es muy sociable con otros perros, que le ayudan a ir más confiada. En el patio estando suelta te sigue y si vas hacia ella se deja tocar y coger. No disfruta las caricias, se tensa, no le han debido dar muchos mimos... Pero es una perra estupenda y cuando confíe empezará a ser cariñosa.