Son Cuenca

Son junto con su mamá Leka, vivían en mitad del campo, en un pequeño vallado, sin apenas comida ni agua, y sin salir nunca de allí...
He logrado sacarlos de allí, les prometí que lo haría la primera vez que los vi y lo he conseguido. Son ha vivido siempre solito... su madre Leka estaba al otro lado de la valla, es un perrito muy bueno y cariñoso, pero puede gruñir a otros machos algunas veces, no siempre, pues otras tantas le encanta jugar con ellos, en casa convive con todos y nunca ha mordido a nadie, creo que lo hace más por miedo a que le hagan algo. Con otras hembras se lleva estupendamente y le encanta jugar con ellas., Nunca ha sabido lo que es el cariño y el cuidado de una casa, y ahora es su oportunidad de conocerlo.

Ha aprobado la prueba en la gatera de Alba, no le interesan y los gatos se acercaban confiados.

Ya está castrado y su analítica ha dado dudosa en leishmania, pero sólo necesita tomar alopurinol ya que está perfectamente. La ehrlichia es negativa.

Así vivía Son.