Shaskia Hippy

Esta galga maravillosa, no ha tenido una buena vida, la recogimos vagando por el arcén de una carretera con una cuerda colgando del cuello, sin duda ha vivido atada toda su vida hasta que mordió la cuerda y escapó de su cautiverio.

Es tranquila y muy dulce. La vida que sin duda ha llevado le ha hecho ser desconfiada y temerosa, pero se esconde y se queda tranquila en la parte dormitorio del chenil.

Ya ha salido a dar algún paseo con correa y va bien, tranquila mirando todo a su alrededor con curiosidad, en poco tiempo habrá perdido ese miedo a los humanos que la han tratado tan mal.

Ya está castrada. Negativa de leishmania, según analíticas generales no hay sospecha de ehrlichia.