Iker Axla

 Me llamo IKER y nací en uno de esas famosas fábricas de animales. Sí, esos criaderos sin ningún control y en donde vivimos cientos de animales en unas condiciones infrahumanas y explotados para que la gente pueda comprar perritos de raza, sin saber todo el sufrimiento que hay detrás de esta acción. Por lo tanto, es normal que mi carácter haya sido siempre un poco desconfiado.

Una Asociación me rescató de ese infierno y me llevó a una casa de acogida donde he vivido más de dos años sin dejarme tocar. Eso sí, he convivido con perros y gatos y me llevaba bien con ellos pero cuando alguien me intentaba tocar les saltaba a morder porque me daba miedo el contacto humano. No soy un perro malo, soy un perro con muchos traumas y que estoy intentando superarlos. Ahora vivo en ALBA y he aprendido a andar con la correa, convivo con otros dos machos en la oficina de la Asociación y me gusta que me den chucherías que me encantan. Necesito una familia que me ayude a superar mis miedos y me haga entender que no es necesario morder cuando me acarician porque las caricias son buenas. Crees que me podrías ayudar?

Ya está castrado. Analítica de leishmania negativa, según analíticas generales, no hay sospecha de ehrlichia.