Cali Ultra*

Cali vivía en la calle, las alimentadoras de su colonia vieron que era sociable y la recogieron, castraron, vacunaron y le buscaron una familia. Creyeron que era una buena adopción, pero no fue así y a los pocos meses unos voluntarios de Alba vieron a una gata rubia siguiendo a todo el mundo por la calle buscando amparo. Quién era? pues según su chip, era Cali, que el desalmado de su adoptante había dejado abandonada en la calle. Su teléfono no contestaba, lo había dado de baja sin duda para que no se le pudiera encontrar a sabiendas de su mala acción.

Acogida en nuestro albergue, se han hecho con la Comunidad de Madrid los trámites necesarios para obtener cesión y poder buscarle la familia que necesita.

Es una gata juguetona, cariñosa y sociable, tiene unos colores muy originales, se puede decir que es una gata única.

Ya está castrada y vacunada.

Test FELV-FIV negativo.