Idalia ha tenido muy mala suerte en la vida. Ella es una de las 25 galgas que acogimos en ALBA, tras ser rescatada, junto a otros 215 animales, de una muerte segura.
Como tantos galgos, Idalia fue utilizada para la caza y cuando ya no sirvió fue cedida a un auténtico sanguinario: El Vampiro de Humanes, como la prensa lo apodó.
Un ser vil que hacinaba galgos, gatos y conejos para desangrarlos hasta la muerte y posteriormente comerciar con su sangre. Se estima que llegó a asesinar a un total de 500 animales. Sabemos que así contado, parece un macabro relato de ficción, pero no lo es.
Como es lógico, Idalia llegó con mucho miedo. ¿Qué podía ella esperar de un ser humano, después de lo vivido?
Poco a poco, hemos conseguido que vaya confiando en nosotros. Que esté tranquila, que disfrute del entorno y de sus compañeros peludos y, sobre todo, que se sienta segura.
Idalia no es una perra que se abalanzará sobre ti en cuanto te vea, pero que sí te acompañará y querrá cuando sepa que puede confiar en ti.
Sobra decir que la pobre se merece salir del albergue y tener una familia que sí sepa cuidarla y hacerla sentir bien.
¿Te animas a darle la oportunidad de su vida?
Ya está castrada. Analítica de leishmania negativa, según analíticas generales no hay sospecha de ehrlichia.
