Crispin

Su historia

Me llamo CRISPIN y aparecí abandonado por un pueblo de Cuenca. Al verme y por mi aspecto, estaba claro que me habían abandonado. Por la cantidad de picaduras de pulgas que tenía, me había salido una dermatitis en la piel que me están tratando en ALBA.

Soy un pequeñajo muy simpático y cariñoso que sabe andar con la correa y al que le gusta jugar. Cada día me encuentro mejor porque al principio tenía tantos picores que no podía parar de rascarme. En ALBA me dan hasta sesiones de SPA. Si, como lo oyes ... sesiones de SPA y yo me dejo sin rechistar. En pocos días me habrá crecido el pelo y podré irme contigo a casa. A que tienes un rinconcito en casa para mí?

Análisis de leishmania y ehrlichia negativa.