Su historia

Petarda (su nombre no la define) es una gatita muy joven aún, tan solo tiene 7 meses, pero lleva ya 5 meses con nosotras.

Llegó a ALBA gracias a un aviso que nos dieron. Una mujer la encontró cuando no era más que un bebé sola en un parque. La gatita tenía bastante miedo en ese momento, como era de esperar.

Es todavía una gatita con bastante miedo. Al crecer en el albergue en lugar de en una casa, no ha socializado tanto con los humanos y no está tan acostumbrada a la interacción como nos gustaría.

Lo que necesita es un hogar en el que estar acompañada, para que aprenda a confiar al 100% en las personas y, en resumidas cuentas, mucho, mucho cariño y amor que es lo que la pobre no ha podido tener y de verdad necesita. Es todavía muy jovencita y se merece una oportunidad.

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Nos dan un aviso los locales de una señora que se ha encontrado en un parque, un bebé de gato solito, y lo ha recogido. Nos acercamos al domicilio para recoger a la gatita, es una pequeña fiera, tiene miedo.
Con los días y el trabajo de los voluntarios irá cogiendo confianza y será una gata encantadora.

Ya está vacunada y castrada.

Test FELV-FIV negativo.

Los cachorros de gato deben vivir en parejas para su mejor socialización.