No queremos que nadie se olvide de los gatos que más tiempo llevan en ALBA y, por eso, queremos volver a hablaros de ellos. A pesar de que están cuidados y, muchos de ellos, en casas de acogida, necesitan tener un hogar definitivo donde ser un miembro más de la familia dejando así un hueco para otro gato que lo necesite.
Cuando me he puesto a escribir este post, lo primero que he hecho es mirar el que escribí hace unos meses para ver los gatos que se habían ido desde entonces y hacer mi nueva lista. Me he llevado una decepción tremenda al ver que, salvo ANGGY HIPPY, todos los demás siguen en ALBA. Por eso, voy a escribiros todavía con más ganas de ellos, para ver si alguno encuentra el hogar que tanto merece.
VIENA CONDE lleva ya para cuatro años en ALBA. Esta preciosa gata vivía en las calles y se buscaba la vida como podía. Como pasa muchas veces, la persona que alimentaba y cuidaba la colonia en al que vivía se dio cuenta de que era un animal sociable con las personas y se la llevó a casa. Allí demostró no sólo ser un amor con las personas si no que también es capaz de convivir con gatos y perros. Igual por sus años en la calle, por su carácter o por ambas cosas, VIENA CONDE es algo independiente aunque no distante. Su hobby favorito: tumbarse a descansar 🙂
KEVIN CRUZ llegó a ALBA un poco más tarde, a principios de 2011. También vivía en la calle junto a otros gatos y lo hacían gracias a que una persona les alimentaba. Como no estaban seguros, esta persona fue ganándose su confianza hasta que cnsiguió cogerles a él y a KIMI CRUZ. Les llevó a su casa y empezó a enseñarles que no todas las personas eran malas, les enseñó a confiar y poco a poco KEVIN CRUZ fue siendo cada vez menos desconfiado. Nos dicen de él que es muy bueno y que le gusta jugar y estar con personas.
CORINA es una gata especial para nosotros porque, cuando la rescataron de la calle, se fue con una de nuestras colaboradoras más queridas y que ya no está con nosotros, ANNE. Con ella fue muy feliz porque la sabía entender. CORINA es independiente pero sólo cunado quiere porque le encanta recibir caricias de las personas. Los gatos le son indiferentes, es más de estar tranquila sin que la molesten mucho. Eso sí, le gusta mucho jugar al a pelota y a veces trastea un poco con ella pero es algo normal.
FUSIA ORIZA es otra de las gatas que más tiempo lleva con nosotros. A pesar de tener sólo un ojo, nadie lo diría pues se mueve de maravilla y se maneja sin problemas. Es lógico que se apañe bien en casa, vivía en una calle donde pasaban muchos coches y no tuvo problemas. Es cariñosa, tanto que fue recogida para castrarla y que volviera a su colonia pero viendo cómo se portaba con las personas decidieron quedársela.
HOLLY COG tuvo la suerte de ser encontrada por unas niñas que, afortunadamente, se apiadaron de ella. A la pobre se le quedó la cabeza metida en una vaya pero la salvaron y la llevaron a casa de una de nuestras colaboradoras. Llegó muy asustada pero se veía a la legua que era mansa y buena. En su casa de acogida aprendido a vivir en un piso con personas y hermanos y hermanas gatunos.
COLABLANCA LOPE nació en un jardín de una familia con buen corazón. Su mamá gatuna no podía alimentar a la camada y estas personas le ayudaron a criar a sus pequeños. Allí aprendió a jugar y a ser un gato feliz y, cuando intentaron meterle en un piso, lo pasaba fatal. Es muy sociable y se lleva bien con personas y gatos pero no es feliz encerrado todo el día por lo que necesita de una familia que tenga un jardín y que viva en una zona tranquila.
NASH CRUZ es el típico gato casero del que se cansan y dan la patada. Le dejaron en la calle destinado a morir ya que los gatos caseros no han aprendido a sobrevivir y son carne de cañón. Tuvo la suerte de ser rescatado y de pasara a vivir con una familia de acogida. Lo curioso es que no fue un rescate si no casi una súplica por que le sacaran de ahí. Sólo hubo que abrir el transportín y se metió como un tiro dentro. Es cariñoso y muy sociable.
MIMI DRADE fue rescatada de la calle cuando era tan sólo un bebé. Estaba al borde de la muerte debido a la desnutrición así que hubo que alimentarla a biberón y cruzar los dedos. Se recuperó estupendamente bien y hoy es una gata sana y fuerte. La secuela que le ha quedado es que es un poco asustadiza pero convive perfectamente con personas y gatos.
CLARA PÉREZ también salió de una colonia felina. Cuando se acercaba la gente, la pobre se volvía loca y trataba de recibir cariño y atenciones así que la cogieron. Tenía el rabo roto y muchas ganas de tener una casa. Lo primero lo resolvimos y ahora nos queda buscarle un hogar. Es juguetona y cariñosa por lo que necesita de gente que la quiera de verdad.
Estos son nuestros gatos veteranos pero en ALBA hay muchos más. Si estás interesado en conocer a alguno de ellos, ser casa de acogida o padrino sólo tienes que entrar en www.albaonline.org.
Patricia Vadillo