Comunicado de los gatos de ALBA

Los gatos de la protectora ALBA quieren hacer público un comunicado para expresar su malestar con que siempre se les considere causa fundamental del asma infantil cuando un estudio ha demostrado que son el tabaco y la contaminación durante la gestación los principales causantes y no sus preciosos pelajes.

Los gatos de la Asociación ALBA hemos querido hacer saber al público nuestra disconformidad con las acusaciones vertidas sobre nosotros con referencia al asma y a la alergia. De siempre se ha dicho que somos culpables de provocar estas enfermedades en los niños con los que convivimos y se nos llenaba la boca de negarlo pero pocos nos hacían caso. Por fin, se ha publicado un estudio en el que queda demostrado que las principales causas de estas patologías son el tabaco y la exposición a la contaminación durante el embarazo.

Esto no lo decimos sólo nosotros o la gente de ALBA que está harta de explicarlo, lo dice también la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (Seicap). Igual como son científicos y estudiosos a ellos les hacen más caso. Los expertos recomiendan a las mamás que sigan una dieta saludable durante el embarazo, que eviten exponerse a la contaminación (sobre todo en las horas punta de tráfico) y que reduzcan su nivel de estrés. Pero no recomiendan en ningún caso deshacerse de sus gatos o no tenernos como animales domésticos. Además, un estudio español publicado en la revista Thorax confirma que la exposición de las madres a la contaminación está íntimamente relacionada con que sus hijos desarrollen déficit de la función pulmonar a lo largo de sus primeros años de vida.

El Doctor Luis García-Marcos, miembro del Grupo de Trabajo de Alergia Respiratoria del Seicap, comenta que “se ha demostrado que los hijos de madres expuestas a partículas diésel en la gestación tienen una función pulmonar baja a los 10 años”. Que nosotros sepamos, los gatos emitimos ronroneos pero no partículas diésel. También ha comentado este experto que “fumar durante el embarazo puede multiplicar por dos, o incluso por tres, las probabilidades de desarrollar asma durante la infancia”. Por desgracia, entre el 10 y el 35% de las madres siguen fumando. “Es muy importante concienciar a las madres de todos los problemas, sobre todo a nivel respiratorio, que pueden ocasionar a su hijo si fuman durante la gestación. Es el factor de riesgo más importante y, al mismo tiempo, uno de los más fáciles de modificar”, asegura este especialista. Continúa explicando que “es tan dañino que, aunque la madre no fume, también puede verse perjudicado el niño si ésta se expone al humo durante los nueve meses”.

Los especialistas suecos también se han pronunciado sobre el tema y han publicado una investigación en la revista Pediatrics. En ella defienden que la exposición al humo, tanto al propio como al ajeno, provoca un alto riesgo de que los niños desarrollen alergias hasta los 16 años. ¡Ya está bien de culparnos a nosotros! Una vez más no se nos cita como factor de riesgo en el desarrollo de estas enfermedades.

Según la Seicap, el 12% de la población infantil padece asma y casi un millón de niños tiene algún tipo de alergia. Las cifras parecen ir aumentando poco a poco aunque no de la misma forma. También hay que tener en cuenta que hay factores genéticos pero no factores gatunos.

En resumen, los gatos hemos soportado la leyenda urbana de provocar alergias y asma en los niños cuando han sido otras circunstancias las que los han provocado. Es comprensible que las mamás de niños con alergia a nuestro pelo no tengan gatos pero no que nos echen la culpa de su enfermedad. Estas patologías se desarrollan con el paso de los años y, por eso, es muy fácil echarnos la culpa pero no es así y los estudios nos dan la razón. Así que querida Mamá, ¡abandona el tabaco y las malas costumbres pero no a vuestro fiel amigo el gato!

Firmado: Los gatos de ALBA en nombre de todos nuestros congéneres.

Fuente: Agencia EFE.

Patricia Vadillo.