Nos roban una perra en ALBA y encima nos calumnian e injurian

Nos ha pasado algo tan insólito como cierto: nos robaron a una perra dentro del albergue. El animal fue encontrado tiempo atrás sin chip ni forma de buscar a sus dueños por lo que pasó a ser nuestra a los 10 días según estipula la ley. Había sido atropellada así que la hemos operado, curado, tratado y mimado pues es un encanto de perra. La bautizamos ENEYA y de momento está con nosotros a la espera de ver qué sucede. Este es el relato de lo que pasó contado por Carolina Corral.

El sábado 29 de Noviembre a la hora de comer recibimos la llamada de la Policía de uno de los municipios donde ALBA lleva la recogida de animales. Han encontrado una perra en una cuneta. Nos dirigimos al lugar y descubrimos que la perra presenta síntomas de haber sido atropellada, con imposibilidad para andar y mucho dolor llegando a gritar al manipularla para meterla en el transportín. La perra es trasladada a una clínica de urgencias donde le hacen radiografías y le ponen tratamiento analgésico y antiinflamatorio. Tanto la policía como nosotros le pasamos el lector y NO TIENE CHIP siendo obligatorio que los perros se encuentren identificados mediante el microchip tanto en Madrid como en Castilla la Mancha.

La perra presenta una fractura doble de cadera. Tiene la vejiga dañada del golpe y al sondarla orina con sangre. Durante más de 20 días permanece hospitalizada mientras se la administra tratamiento analgésico, antiinflamatorio y antibiótico. En los primeros días se la tiene que sondar para que pueda orinar y se le ponen enemas para que pueda hacer caca ya que el dolor y la dificultad para ponerse de pie le impide hacerlo por si misma. Se le realiza un análisis rutinario que se le hace a todos los animales llamado coprológico para ver si tiene algún tipo de parásito y la perra tiene cystoisosporas para las cuales le ponemos tratamiento rápidamente. Durante todos estos días hay que mantenerla inmóvil en una jaula de hospitalización y con empapadores para absorber los pises ya que no puede ponerse en pie y cualquier cambio de postura para ella es un verdadero infierno ya que aunque los calmantes son de los mas fuertes, el dolor producido por una fractura de cadera es elevado. A diario o por lo menos día si y día no se la baña con agua caliente ya que, aunque se le ponen empapadores, muchas veces se mancha cuando hace sus necesidades ya que le es imposible ponerse de pie para hacerlo. Pasadas tres semanas la perra empieza a ponerse de pie y los dolores van remitiendo poco a poco pudiéndose bajar la dosis de los calmantes.

La ley dice que pasados 10 días de recoger un animal sin chip pasa a ser propiedad de la protectora y por lo tanto en los últimos días pasamos a poner el chip a la perra a nombre de la asociación ALBA, a castrarla, hacerle limpieza de boca, porque el estado de la misma no era bueno, y a vacunarla de la tetravalente y la KC, vacuna para la tos de las perreras. También se le realizan las analíticas de leishmania y ehrliquia como estipula nuestro protocolo de actuación con cualquiera de nuestros animales.

El día 30 de Diciembre nos llaman unas personas diciendo que se ha enterado de que tenemos a su perra. Les informamos de cómo tienen que hacer para poder venir a recogerla. Se presentan varias personas acompañadas de dos niños. Les preguntamos que por qué no tiene chip la perra y nos dicen que no han tenido dinero para pagarlo. La edad de la perra es de unos 8 años pero durante esos 8 años no le han puesto el chip y la rabia que son obligatorios por ley hace más de 20 años. Además, el chip hubiera servido para avisar inmediatamente al dueño cuando se la recogió atropellada.

Les informamos de que, tal y como dice la ley, el animal se entregará previo pago de los gastos ocasionados e identificada con chip, y les decimos que el importe total que ALBA tiene que abonar a los veterinarios por los gastos ocasionados por su supuesta perra es de unos 500 euros. Cualquiera que haya tenido a su animal hospitalizado sabe que sólo un día de hospitalización son 50 euros. La perrita que mencionamos ha estado 20 días hospitalizada, le hemos hecho 3 radiografías, le hemos tenido que sondar en más de una ocasión, le hemos hecho coprológico, ecografía, analítica de leishmania y ehrliquia, vacunación de tetravalente, vacunación de la KC, tratamiento para quitarle las cystoisosporas, castración, limpieza de boca, e identificación con el chip.

Estas personas nos dicen que no tienen dinero para pagar el coste del tratamiento que se le ha proporcionado a la perra y nos piden que si lo pueden pagar a plazos. Se les dice que dejen sus datos y que se les llamará al día siguiente para darles una contestación.

Nos piden el favor de dejarles ver a la perra porque la niña está llorando y lógicamente accedemos a que la vean y se la enseñamos. Para el que conozca nuestra instalaciones, la perra se encontraba en la sala donde atendemos las adopciones y donde se encuentra la entrada a las 3 gateras. Es una zona con loseta en el suelo, mesa con sillas, 4 puertas acristaladas, 3 de ellas de entrada a gateras y otra de entrada a la zona del quirófano y enfermería para estar vigilada. Tiene su cestita junto al radiador y junto a la puerta 4 hojas de periódicos para cuando la perrita tiene ganas de hacer pis que aprenda a hacerlo así hasta que el veterinario le de el alta para salir a la calle. El recinto al igual que todo el albergue está perfectamente limpio, porque además es la sala donde se atienden adopciones y nos gusta cuidar esos detalles.

Estas personas cogieron a la perra en brazos y se dirigieron a la puerta de la calle. Nuestro guardés les preguntó que que estaban haciendo pero comenzaron a pasarse la perra entre ellos mientras nuestro guardés les decía que así no se hacen las cosas, todo esto en presencia de los niños.  Nuestro guardés intenta pararlas pero no se atreve a agarrar a la perra porque sabe lo delicada que está y los dolores que ha pasado y no quiere hacerle daño. Estas personas llegaron a la puerta de salida del albergue y nuestro guardés se puso delante de la puerta para que no pudieran salir pero una de ellas agarró el tirador y le dio tal tirón que arrancó la puerta de su sitio estampándosela a nuestro guardés. Éste coge el teléfono y nos llama corriendo para informarnos de lo ocurrido. En la puerta se encontraban dos señoras que pretendían entrar a recoger gatos de sus colonias y que habíamos castrado y lo presencian todo en primera línea incrédulas.

De todo esto tenemos imágenes grabadas ya que hay unas 5 cámaras de vigilancia que graban las 24 horas por todo el albergue y se puede observar perfectamente como nos rompen la puerta y se van con la perra en contra de la voluntad de nuestro guardés.

Además de todo lo mencionado y de la lamentable e ilegal forma de actuar de estas personas, que en vez de demostrar que pueden ser responsables de los cuidados de esta perra a la que ni siquiera han puesto el chip durante 8 años, se han dedicado a difundir injurias contra ALBA,  haciendo juicios de valor con la intención de desacreditar y menospreciar la actuación de esta asociación, vertiendo afirmaciones como que somos unos peseteros, cabrones, desgraciados, que hemos maltratado física y psicológicamente a la perra, que la teníamos durmiendo en periódicos sucios y en un cuarto lleno de suciedad, que decidimos operarla cuando nos enteramos que la estaban buscando sus dueños para “subir la cuenta” etc.

Todo lo que dicen no es cierto, aquí se trabaja con profesionalidad y ética, de manera muy distinta a la que ellos intentan transmitir en su divulgación contra esta asociación. Con estas afirmaciones, están tergiversando los hechos e incurriendo en contradicciones, ya que en esta asociación se le ha dado a la perra, que fue recogida atropellada, el tratamiento veterinario y los cuidados necesarios.

Como protectora de animales que somos nos importan enormemente los animales que atendemos y se actúa en cada caso aplicando los conocimientos y experiencia de nuestro equipo veterinario para sacar adelante y ayudar a los animales.

Ante las acusaciones tan graves vertidas contra esta entidad que atentan contra nuestra dignidad y constituyen una ofensa y una falta de respeto hacía nuestra labor, les hemos ofrecido la oportunidad de rectificar estas afirmaciones en el mismo medio de difusión donde ha divulgado las manifestaciones atentatorias a nuestro honor antes de tomar medidas legales. Por el momento han puesto una disculpa pero seguimos a la espera de que rectifiquen todo lo que han dicho.

Carolina Corral.